Otra Leo para la familia, mi tocaya no solo del zodiaco, sino de curiosidades, de amplias pasiones, de sensibilidades personales y con esos gustos que refinan cada uno de los sentidos. Una tocaya para rebeldías y justicias; de esas que necesita este mundo con tanta ausencia de respeto a la autoridad, de esas que frenan en las puntas a quienes cuestionan sin argumentos, aclarando verdades colectivas y defendiendo el fin o los medios.
Quien viera a mi Valen pisando fuerte con esos risos que rebotan como resortes. De piel canela con crespos dorados, ojos penetrantes y cejas contundentes. Con ella a veces pareciera que detrás de cada pestañeo hay una nueva idea, una nueva pieza para su rompecabezas que pareciera que tarde o temprano saldrá dando gritos y tocando cacerolas para poner en orden lo que debe estar en orden, para retomar valores que se han perdido pero que lleva tatuados en sus entrañas. Ella mientras calla observa, absorbe; mientras habla, aprende y afina. Mi Valentina vino a cambiar el mundo no solo el mío o el de ella, sino el de ustedes los que ni saben lo que les espera y quienes todavía deben esperar pacientes a que se geste eso tan inesperado y tan acertado que será su legado.
Nació rebelde para poder cumplir, para poder proteger, para poder impactar en el momento menos esperado y en el que para ella seguramente será el más anhelado. Y mientras son sus risos los que hoy llaman la atención y paralizan las miradas a su paso, muy adentro se cosecha lo que verdaderamente importa, ese cumulo de experiencias, juicios, pasiones y devociones que sin opacar sus risos descompilados y su caminar magnético saldrán para impactar y este mundo jamás será lo mismo. Ojo, porque pronto el mundo será de ella, y ella no dará su brazo a torcer hasta conseguir condiciones y justicias para todos.
Es la hija de su padre, igual que yo la del mío, algo más en lo que somos tocayas de sangre y corazón. Él mientras más la “torea”, sin casi darse cuenta más la reta y la prepara para enfrentar a quienes a ratos desviaran su camino. Pero lo que Alejandro no sabe todavía es que sin darse cuenta ira transformándose por ella y para ella, según empiece a ganar más de una partida y le coloree el mundo con otros tonos y contrastes.
Con sus uñas se aferra a su certidumbre, a sus rincones conocidos, a sus áreas de confort coloreadas con los brochazos de la artista que la contiene; su mamá. Todavía no sabe que la vida le ira rompiendo las barreras, pero no entregará jamás el corazón tan gratis sino con cuidado, escogiendo y jamás desperdiciando en lo que no amerita ni necesita de su energía. Con ella todo será ganado y eso lo hará más valioso. Ella da primero con gotas hasta derramar en ríos amor, esfuerzo, ternura, compromiso a esos que ella considera suyos; así como lo hacer con un corazón canino, blanquito y suavecito que bautizó Neva.
Ella siempre existe con intensión, con esa mente que analiza y reanaliza para convencerse o disuadirse de todo y de nada. Ella no se queda contenta sabiendo solo lo que le quieren contar, a ella no se le escapan esas cosas que se quedan entre líneas, siempre está resulta a descubrir.
Talvez será por eso que con cuidado, opinión, y a ratos un poco de desconfianza, se va acercando a sus pares e impares sin saber bien como mimetizarse; pareciendo a ratos pasar desapercibida. Pero no se dejen engañar ella nació para brillar, nació para construir con tiempo lo que a muchos nos toma poco, pero que también nos dura poco. Lo de ella no será jamás superficial, estará arraigando de la raíz hasta la punta y perdurará contra vientos y mareas, porque las pasiones la movilizan, pero la razón la mantiene contenida y siempre inquieta.
Con los 20 años de diferencia que nos separan, y sabiendo que su generación es la primera que tiene vidas paralelas e inevitablemente privadas y me es inevitable sentir hoy que mis impresiones solo abarcan un pequeño pedazo de su mundo, y que no se del todo si acierto en mis percepciones. Siempre tengo la duda de como será fuera de casa, de como son sus vínculos, sus rutinas, sus juicios, sus amores y también sus desamores. Pero lo que si es imposible es no estar segura de que Pepa va creciendo, y esta madurando para ser la mujer de mujeres, con esa pasión de pasiones, y que soy afortunada que sea mi tocaya de alma y gemela de risos. Es mi esperanza de una prometida e irremediable sorpresa en potencia que me convocará a más de una lucha con más de un ideal y que me volteará el volante a nuevos y mejores caminos.
Así que mientras Valen escoge si prefiere ser hippie o chic, si llevar el pelo suelto o recogido, lucir sedas vaporosas o jeans agujereados, caminar con tenis trajinados o tacones de pasarela; mientras eso pasa, gozaré viéndome un poco en el espejo y aportando cositas de experiencia de alguien que ha luchado y perdido algunas batallas, pero al final a logrado ganar también algunas guerras. Pero sobretodo, estaré expectante por ese día en donde mi VALENTINA con VALENTIA se dispondrá a cambiar el mundo.